De primer grado: El principal síntoma es el enrojecimiento de la piel y el ardor.
Debes: Aplicar compresas frías y una pomada, evitar colocarse elementos que rocen la zona.
Si la quemadura es por ácidos lavar con agua abundante hasta eliminar la sustancia de la piel.
De segundo grado: Se ven ampollas en la piel afectada, afectan la primera y segunda capa de la piel y se siente un dolor intenso.
Debes: Limpiar la zona con abundante agua o un antiséptico, cubrir con gasas estériles sin apretar.
Si las ampollas son a causa de quemaduras solares, colocar la persona a la sombre e hidratar inmediatamente para prevenir shock. Luego de controlar la situación visitar un médico para recibir medicación y evitar infecciones o cicatrices no deseadas.
De tercer y cuarto grado: Aparecen ulceraciones, con destrucción incluso de tejidos profundos y la piel se torna grisácea o carbonizada.
Debes: Acudir de inmediato a un centro de salud. Mientras recibes atención médica no echar agua fría al accidentado para evitar shock, no aplicar pomadas.
Evitar infecciones cubriendo con una tela estéril y húmeda, y si no representa riesgo retirar ropa muy cuidadosamente.
Revisar los signos vitales y la respiración y si la persona padece dolores intensos administrar analgésicos,
El tratamiento de quemaduras de tercer grado dependerá de la severidad de éstas, La severidad es determinada por la cantidad del área superficial del cuerpo que ha resultado afectada.
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